Diferenciar y apreciar frutas y verduras ecológicas de las no ecológicas

Mercadillo ecológico en la Plaza  Alameda de Hércules de Sevilla,  el segundo sábado de cada mes

En las siguientes fotografías, voy a mostrar frutas y verduras ecológicas compradas en este mercadillo en la Plaza de la Alameda de Hércules de Sevilla, que estarán en el lado izquierdo, y frutas y verduras no ecológicas compradas en un supermercado, que estarán colocadas en el lado derecho de las fotografías. 

Una oportunidad para potenciar el consumo local y la relación directa entre el productor y el consumidor.  Los productos ecológicos, también
llamados, biológicos, orgánicos o bio, son aquellos productos naturales obtenidos sin la utiización de productos químicos, antibióticos u hormonas, se elaboran por métodos naturales que conservan y protegen el medioambiente.

Miradlos bien.

 Esta fruta cítrica es excelente para hacerle frente a una gripe o a cualquier otra enfermedad del sistema respiratorio. El limón ecológico  posee un notable poder bactericida frente a una amplia variedad de infecciones virales. Por su efecto desinfectante y su poder tonificador de diferentes músculos el limón es ideal para curar rápidamente las afecciones de la garganta y las cuerdas vocales.

Podemos apreciar que los limones ecológicos colocados a la izquierda lucen más grandes, los limones de la derecha tienen el color más llamativo. En cuanto al sabor, mucho más intenso y sanador el ecológico.

La naranja ecológica es muy abundante en sales minerales, y aunque posee pocas calorías, ofrece una rica gama de vitaminas, entre las que destaca la C o ácido ascórbico. La naranja, en su calidad de agrio, es rica asimismo en carotina. La naranja es un poderoso microbicida y desinfectante.

El ajo ecológico es rico en hidratos de carbono y proteínas y, en menor cantidad, contiene vitamina B, B1 y C, fósforo y hierro. Es antibiótico, depurativo y tonificante; también es anticancerígeno, aumenta la capacidad inmunológica del organismo y es bueno contra la arteriosclerosis. Es muy bueno para las personas que padecen intoxicaciones bacterianas, indigestiones, dolores intestinales, edemas, diarreas, disentería, malaria, difteria, inflamaciones de la úlcera y dermatitis. En algunos países se utiliza para paliar los efectos del sida. Pero sobretodo es un importante bactericida gracias a la sustancia que lo hace picante; hace efecto contra un gran número de bacterias: estrafilococo amarillo, diplococo de la meningitis, bacilus tifoideo, bacilus disentérico...

El valor nutricional de una zanahoria ecológica se estima que es 10 veces mayor, además de no contener venenos procedentes de pesticidas, herbicidas, abonos químicos, etc. El valor nutricional de la Zanahoria Ecológica (vitaminas, minerales, aminoácidos…) la coloca entre los 10 alimentos más nutritivos.Y más arriba aún, sabiendo que no contiene elementos tóxicos. 

La clave de los tomates ecológicos está en su intenso color rojo, síntoma de su alto contenido en licópeno, un tipo de caróteno cuya virtud es ser un potente antioxidante. Además, el tomate es rico en vitamina C y E y con un alto contenido en potasio.

El bulbo del nabo ecológico, tiene propiedades digestivas, por lo cual es muy útil para tratar casos de estreñimiento. Para aprovechar esta propiedad basta con incluir al nabo dentro de la alimentación, también puede ingerirse como puré.El nabo es antiinflamatorio, por lo cual puede ser utilizado de manera externa para disminuir la hinchazón y el dolor provocado por golpes. La mejor forma de utilizar esta propiedad es mediante la aplicación en la zona afectada de cataplasmas en base a la pulpa de su bulbo. Esta planta tiene pequeñas propiedades sedantes, una de las mejores formas de utilizar estas propiedades es preparando y consumiendo una sopa de nabo.

El perejil ecológico se ha utilizado como diurético, carminativo, expectorante, emenagogo e incluso se cree que tiene propiedades afrodisíacas.

La hierba del perejil que normalmente se utiliza para cocinar, es una fuente realmente impresionante de vitamina C por lo que cualquier dolencia referida a falta de vitamina C puede ser prevenida o disminuida con consumirla. El perejil estimula el ciclo menstrual, tranquiliza la flatulencia, el dolor de estómago o cólicos.

Las cebollas ecológicas son ricas en vitamina C y zinc. Es preferible consumirlas en crudo. Entre sus beneficios para el organismo, ayuda a la eliminación de colesterol, regula el nivel de grasa en sangre o previene la arteroesclerosis. Es muy recomendable para problemas circulatorios.

El aguacate tiene la cualidad de bajar el colesterol de la sangre, debido a que contiene grasas mono insaturadas. Ayuda a la sangre en la formación de hemoglobina, por su gran contenido de sal y de acido fólico. Es muy importante para la elasticidad de la piel, gracias a la vitamina C que posee, al igual que la banana tiene un alto contenido en potasio. También contiene luteína un fotoquímico que actúa como preventivo en problemas visuales como por ejemplo cataratas.

Uno de los hortelanos del mercadillo me explicó que, cuando dejas fuera de la nevera una verdura o fruta ecológica, ésta se irá consumiendo y secando hasta quedar como una pasa, sin mohos que la inunden. Hice la prueba, y obtuve el resultado que aquí expongo. Fue cierto, lo que véis es un nabo, que aun guarda el mismo aroma intenso y profundo de la verdura ecológica.

También puedo mostrar algunos platos riquísimos que preparé en casa. De primer plato hice una sopa de papas con pimiento rojo ecológico y comino, de segundo croquetas de acelgas ecológicas,  y de postre, un bizcocho de zanahorias ecológicas. Todo tenía un aroma especial, pero el placer del sabor era extraordinario, intenso, infinito.